
Walmart ha dado un nuevo paso en su transformación digital al aplicar tecnología geoespacial personalizada para rediseñar sus zonas de reparto. Esta estrategia, basada en ciencia de datos, permite mejorar la eficiencia operativa y ampliar la cobertura del canal de entrega.
La compañía ha desarrollado un modelo que sustituye los tradicionales códigos postales por una red de rejillas hexagonales que representan unidades de análisis geoespacial. Cada “hexágono” se convierte en una celda cargada de información dinámica: capacidad de las tiendas, disponibilidad horaria, tiempos de conducción, demanda local y otros datos relevantes. El objetivo: una distribución más precisa y flexible, capaz de atender a más clientes y optimizar los recursos logísticos.
Esta iniciativa se enmarca dentro de un enfoque más amplio en Walmart: hacer de la tecnología un eje central de su estrategia de crecimiento, desde la inteligencia artificial hasta la automatización de su cadena de suministro. El nuevo modelo geoespacial permite que varios establecimientos colaboren en un mismo pedido, evitando que el cliente tenga que hacer encargos en múltiples tiendas para recibir todos sus productos.
Replanteando la última milla
La distribución ya no es una cuestión de distancia, sino de inteligencia de red. Gracias a esta plataforma, los conductores de reparto pueden recoger productos desde diferentes puntos Walmart de forma coordinada, consolidando la entrega en un solo trayecto.
Este planteamiento rompe con esquemas tradicionales y refleja una tendencia cada vez más presente en el Retail global: reemplazar estructuras logísticas rígidas por soluciones basadas en datos y agilidad operativa.
La plataforma de geointeligencia desarrollada por Walmart está construida con software de código abierto, y se alimenta tanto de fuentes internas como externas. Esto le permite ajustarse a las variaciones en tiempo real, algo esencial en un contexto de consumo cambiante y con crecientes expectativas de inmediatez.
Automatización y sostenibilidad: dos ejes paralelos
La transformación tecnológica de Walmart no se limita al canal de entrega. En su red de suministro, la compañía está apostando por centros automatizados de clasificación y envasado de productos frescos, con una capacidad de almacenamiento y procesamiento que duplica la de las instalaciones tradicionales.
A esto se suma un esfuerzo por reducir el desperdicio alimentario, mediante sistemas de monitoreo de cultivos y separación automatizada de residuos y envases. Estas iniciativas consolidan a Walmart como un referente en eficiencia operativa y compromiso ambiental.
Un modelo que redefine la distribución comercial
Aunque esta innovación nace en el mercado estadounidense, sus aprendizajes son extrapolables a otros entornos. Para el Retail, supone una señal clara: la logística de última milla necesita ser rediseñada con modelos más inteligentes, flexibles y centrados en el dato.
Las grandes cadenas pueden ganar eficiencia integrando inteligencia geoespacial y colaborativa entre puntos de venta, mientras que los operadores logísticos deberán adaptarse a estructuras más descentralizadas y dinámicas.
En un entorno donde la velocidad, la sostenibilidad y la experiencia del cliente definen el éxito, tecnologías como esta pueden marcar la diferencia competitiva para todo el ecosistema comercial.
Fuente: Retail Dive