
El arbitraje salarial, ese momento clave para muchos peloteros en Grandes Ligas, ha sido evitado por varios jugadores venezolanos que lograron acuerdos con sus respectivos equipos antes de la fecha límite.
Entre ellos destacan Luis Arráez, Ranger Suárez y Jesús Luzardo, quienes aseguraron contratos significativos para la temporada 2025.
Luis Arráez, actual campeón bate de la Liga Nacional, firmó un contrato por 14 millones de dólares con los Marlins de Miami, consolidándose como el venezolano mejor pagado en esta etapa de arbitraje.
Este acuerdo no solo recompensa su impresionante desempeño en 2024, donde promedió .354 y lideró a su equipo hacia los playoffs, sino que también refleja su valor como uno de los mejores bateadores de contacto en el béisbol.
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Arráez sigue siendo una pieza central en los Padres, y este contrato refuerza su posición como uno de los peloteros venezolanos más destacados en Grandes Ligas.
Ranger Suárez y Jesús Luzardo: anclas Venezolanas en la rotación
Por su parte, Ranger Suárez llegó a un acuerdo con los Phillies de Filadelfia por 8.8 millones de dólares para 2025.
Suárez, quien ha sido una pieza clave en la rotación de los Phillies, se perfila como uno de los líderes del cuerpo de lanzadores para la próxima temporada.
Su capacidad para brillar en momentos de presión, como lo ha demostrado en playoffs anteriores, lo convierte en un jugador indispensable para el equipo cuáquero.
Mientras tanto, Jesús Luzardo, quien también vestirá el uniforme de los Phillies en 2025, aseguró un contrato por 6.225 millones de dólares.
Este será su primer año con Filadelfia, y se espera que aporte su talento como abridor zurdo, luego de una sólida campaña con los Marlins.
Otros venezolanos que evitaron el arbitraje salarial
Además de estos tres nombres destacados, otros venezolanos también negociaron con éxito sus contratos. José Ruiz acordó con los Diamondbacks por 1.225 millones de dólares, mientras que Luis García firmó por 1.875 millones de dólares con los Astros de Houston.
Por último, Brusdar Graterol y Luis Torrens alcanzaron acuerdos de 2.8 millones y 1.5 millones, respectivamente.
Estos movimientos no solo garantizan estabilidad para los peloteros criollos, sino que también resaltan la importancia del talento venezolano en las Grandes Ligas.
Con estos acuerdos, varios jugadores evitan el estrés del arbitraje y se enfocan en prepararse para la próxima temporada.