
Durante el pasado fin de semana las imágenes de los tres rehenes israelíes liberados por Hamás –Ohad Ben Ami, Eli Sharabi y Or Levy– en un estado lamentable y con evidentes signos de desnutrición han conmocionado no sólo a Israel sino a cualquier persona con un mínimo de sensibilidad y han desvelado la tortura por la que están atravesando las decenas de hombres secuestrados aún por la banda terrorista, 492 días después del 7 de octubre, que según los ya liberados ha ordenado mantenerles en un estado de hambruna sistemática.
Los secuestrados fueron liberados, además, con todo un show mediático –escenario ante el público, entrevistas televisivas…– que quizá no ha tenido el impacto que Hamás esperaba, ya que la banda terrorista ha anuncia que suspende la liberación de los tres nuevos secuestrados que, según el acuerdo de alto al fuego, deberían ser devueltos a Israel el próximo sábado.
Los terroristas alegan que Israel no “cumple con sus obligaciones” y ha pedido a los países que han mediado entre las partes que “presionen” para que “se respete estrictamente el acuerdo”, si bien no han señalado cuáles son los términos del pacto que Israel ha incumplido. Hay que recordar, además, que Hamás suele usar este tipo de tácticas y trucos para sacar más ventaja en los procesos de negociación.
“Todos los rehenes deben ser rescatados urgentemente”
La organización que agrupa a los familiares de las víctimas ha emitido un comunicado en el que apoyan explícitamente al gobierno israelí y solicitan “urgentemente la asistencia de los países mediadores para ayudar a restablecer” el cumplimiento del acuerdo que lleve “al regreso seguro de nuestros 76 hermanos y hermanas” todavía en manos de Hamás.
“La evidencia reciente de las personas liberadas, así como las condiciones impactantes de los rehenes liberados el sábado pasado, no dejan lugar a dudas: el tiempo es esencial y todos los rehenes deben ser rescatados urgentemente de esta horrible situación”, recalcan.
Trump: “Se va a desatar el infierno”
Por su parte, el presidente norteamericano, cuyo papel en la firma del pacto ha sido reconocido por todos aún a pesar de que todavía no estaba en la Casa Blanca, ha aprovechado la ocasión para subir la apuesta y aumentar la presión sobre Hamás, al que ha exigido no ya seguir con el calendario de liberación de rehenes de forma semanal, sino que todos vuelvan a Israel esta misma semana.
“En lo que a mí respecta, si todos los rehenes no son devueltos antes del sábado a las 12 en punto, creo que es un momento apropiado”, ha dicho para insistir posteriormente: “Yo diría que deberían ser devueltos a las 12 del sábado, y si no se devuelven, todos, no a cuentagotas, no a dos, uno, tres, cuatro y dos, el sábado a las 12 en punto, se va a desatar el infierno”.
Se trata de unas declaraciones que ha hecho Trump desde el despacho oval de la Casa Blanca a un grupo de periodistas. Estos le han preguntado qué quería decir con esa expresión sobre el infierno, a lo que ha respondido: “Ustedes lo descubrirán y ellos lo descubrirán, Hamás descubrirá lo que quiero decir”.