
Stoli Group USA, la empresa matriz de la famosa marca de vodka Stoli, ha pedido protección por bancarrota bajo el Capítulo 11 en el Tribunal Federal de Bancarrotas para el Distrito Norte de Texas, en una maniobra que busca reorganizar sus activos y asegurar la supervivencia de la compañía. La solicitud fue presentada el 27 de noviembre de 2024, y según la declaración oficial, esta decisión es “apropiada y en el mejor interés de la compañía”. Sin embargo, detrás de esta medida legal se esconden una serie de factores complejos que han llevado a Stoli a esta crisis financiera.
Desde 2023, la marca ha enfrentado una caída en la demanda de licores, exacerbada por un aumento significativo de los costos. A esta crisis económica se le suman problemas operativos graves derivados de un ataque cibernético que afectó los sistemas de la empresa en agosto de 2024. Este ataque, conocido como un “secuestro de datos”, alteró su capacidad operativa y provocó retrasos que no se resolverán hasta principios de 2025, según lo informado por ‘USA Today’. El impacto fue tan severo que afectó no solo a Stoli Group USA, sino a todas las empresas dentro de su conglomerado.
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El proceso de bancarrota
El proceso de bancarrota se presenta como una oportunidad para que Stoli reorganice sus activos y reestructure su negocio, protegiendo los empleos existentes. Chris Caldwell, CEO global de la compañía, señaló que esta pausa permitirá la reestructuración financiera necesaria para que la marca salga de la quiebra “más delgada y fuerte”. Sin embargo, las dificultades no terminan ahí. La empresa también enfrenta una prolongada disputa legal con el gobierno ruso, que se remonta a la década de 1990, cuando Rusia privatizó las marcas de vodka.
Esta disputa ha costado millones a Stoli, y en julio de 2024, las autoridades rusas incautaron las últimas destilerías de la empresa en el país, valoradas en 100 millones de dólares. La incautación se produjo tras declarar a Stoli como “extremista” por su apoyo a los refugiados ucranianos, un conflicto político que agravó aún más la situación financiera.
Sumado a estos problemas, Stoli se enfrenta a tensiones con sus prestamistas, quienes han señalado un incumplimiento crediticio por la falta de informes financieros actualizados. Un ejemplo de esto es la situación con Kentucky Owl, una de sus marcas de bourbon. Actualmente, la compañía posee cerca de 29,000 barriles de bourbon en almacenamiento, pero las restricciones impuestas por los prestamistas dificultan el manejo y la venta de este inventario.
A pesar de todo esto, la empresa ha asegurado que sus productos, tanto Stoli como Kentucky Owl, seguirán disponibles para los consumidores durante el proceso de reestructuración. Además, el equipo directivo de Stoli planea presentar un “plan conjunto de reorganización” que, según Caldwell, permitirá a la empresa continuar operando y preservar los empleos de su fuerza laboral.
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El futuro de Stoli Group USA
El futuro de Stoli Group USA es incierto, pero el proceso de bancarrota representa una oportunidad para que la empresa intente superar una serie de desafíos económicos y legales. Sin embargo, el camino hacia una recuperación será largo y dependerá de cómo logren resolver sus disputas legales y superar los problemas operativos derivados del ciberataque. Mientras tanto, los consumidores seguirán disfrutando del vodka Stoli, una marca que, aunque ahora se ve atrapada en un torbellino de dificultades, sigue siendo un nombre destacado en la industria de las bebidas alcohólicas.