
El líder opositor venezolano, Juan Guaidó, participó este lunes en una entrevista exclusiva en “La Mañana de Agricultura”, donde abordó la grave situación que enfrenta Venezuela bajo el régimen de Nicolás Maduro.
Durante la conversación, Guaidó destacó las repercusiones de esta crisis en toda la región, incluidas las migraciones masivas y el aumento de la criminalidad organizada.
“Maduro significa migración, crimen organizado y distorsión regional”, afirmó, agregando que, de no revertirse la actual situación, se estima que más de 6,7 millones de venezolanos podrían abandonar el país en los próximos años.
Migración: una crisis continental
Guaidó reconoció que la diáspora venezolana ha generado tensiones en países receptores como Chile, pero enfatizó que la solución pasa por enfrentar al régimen chavista. “La democracia y la libertad son la clave para resolver esta crisis migratoria, no solo en Chile, sino en toda la región”, aseguró.
El líder opositor también llamó a diferenciar entre los migrantes trabajadores y honestos, que contribuyen al crecimiento económico, y los grupos vinculados al crimen organizado. “Los delincuentes deben ser tratados como tales, sin importar su nacionalidad. Generalizar solo causa daño”, expresó.
Además, destacó el aporte de los venezolanos en Chile, desde médicos hasta emprendedores, e instó a no caer en narrativas xenófobas: “La migración siempre beneficia al país receptor; en Chile, podría aumentar el PIB entre un 2 y un 3% en los próximos cinco años”.
La dictadura como amenaza global
Durante la entrevista, Guaidó no solo habló de los efectos internos de la crisis venezolana, sino también de sus conexiones internacionales. Señaló que el régimen de Maduro mantiene vínculos con organizaciones criminales y gobiernos autoritarios como Irán y Rusia, utilizando estas alianzas para evadir sanciones.
“No enfrentamos una dictadura convencional. Maduro se ha modernizado y ha convertido a Venezuela en un centro de operaciones para el narcotráfico y el terrorismo”, advirtió.
En ese contexto, llamó a la comunidad internacional a tomar acciones más contundentes, como sanciones dirigidas y presión diplomática. También valoró las recientes declaraciones del Presidente Gabriel Boric, quien calificó al gobierno de Maduro como una dictadura. “Es un gran inicio. Ahora hay que tomar acciones para hacer los responsables por sus crímenes”, subrayó.
Finalmente, Guaidó reiteró su llamado a los venezolanos, dentro y fuera del país, a mantenerse unidos y a no perder la esperanza. “Hemos resistido durante años (…) Necesitamos más presión interna e internacional”, concluyó.