
Siempre dijimos que nunca habrá otro Michael Jordan, pero al cabo de los años surgió el fenómeno llamado Kobe Bryant (del que hoy 26 de enero se cumplieron cinco años de su trágico fallecimiento) para desmentir cualquier pronóstico desdichado. Quizá no haya otro Djokovic, ni se repita en una pista el derroche de clase natural de
El tenista italiano, 21 victorias consecutivas, le consoló en la red (enorme gesto deportivo) después de haberle hecho papilla: no concedió ni una bola de break a lo largo del partido. Para ser natural de San Cándido, Jannik no es ningún incauto. Con su aspecto frágil y su aparente gracilidad, mata a sus rivales suavemente, como la canción, con saques continuos y certeros de 200 km/h, golpes de revés prodigiosos y una enorme mentalidad para salir airoso de las situaciones apuradas: su fiabilidad en los ‘tie-break’ es digna de estudio.
Bienvenidos a una extraordinaria rivalidad: Sinner vs. Alcaraz. Se han repartido los últimos cinco Grand Slam como en los viejos tiempos del Big 3. Para Carlitos, la presencia del crack italiano es un gran problema a la hora de pujar por los grandes títulos, pero al mismo tiempo debería servirle de estímulo para intentar ser el mejor jugador que pueda ser. Porque los dioses se alimentan con carne de dioses…