El joven argentino Braian Paiz quedó detenido el viernes en el marco de la causa judicial por la muerte en octubre del conocido cantante británico Liam Payne, exmiembro de la banda One Direction, en un hotel de Buenos Aires.

Paiz, de 24 años y quien conoció a Payne siendo camarero en un restaurante de un lujoso barrio de Buenos Aires, había sido procesado días atrás con prisión preventiva por la jueza Laura Bruniard acusado de haber suministrado al músico cocaína el día antes de su muerte el 16 de octubre. Ese delito contempla una pena de cuatro a 15 años de prisión.

Otros tres hombres y una mujer fueron procesados por la jueza en el marco de la investigación.

El cantante murió tras caer al vacío desde el balcón de su habitación en el tercer piso del hotel donde se alojó durante tres días en Buenos Aires, lo que le provocó múltiples golpes y hemorragias interna y externa. Estudios toxicológicos revelaron que en su cuerpo había rastros de alcohol, cocaína y un antidepresivo.

Luego de procesarlo el 29 de diciembre, la magistrada había dado 24 horas a Paiz para que se entregase, lo que no hizo, y finalmente fue aprehendido el viernes en su domicilio en una localidad cercana a la capital, informó a The Associated Press un funcionario capitalino conocedor de la investigación que no quiso identificarse porque no está habilitado para hablar públicamente sobre el asunto.

Los otros procesados son, por un lado, David Ezequiel Pereyra, de 21 años, quien era empleado en el hotel donde murió Payne y también está acusado de haberle suministrado cocaína horas antes de su muerte. Su domicilio fue allanado por la policía, que no logró localizarlo.

Además, está imputado el estadounidense Rogelio “Roger” Nores, representante del artista y que reside en Argentina. Está acusado de homicidio culposo, que prevé una pena de uno a cinco años de prisión para quien por imprudencia o negligencia, en sus deberes causara a otro la muerte. La magistrada no pidió su detención, pero le prohibió salir de Argentina.

Los otros imputados, también por homicidio culposo, son Gilda Martín, la gerente del hotel donde murió Payne, y Esteban Grassi, jefe de recepción del establecimiento hotelero. Permanecen libres.

Ambos se encontraban en el vestíbulo del hotel cuando percibieron el estado de salud de Payne, quien, según la jueza, “no podía sostenerse en pie” por el consumo de drogas y con la ayuda de terceras personas decidieron llevarlo a su habitación, donde había un balcón que era una “fuente de riesgo”.

Payne visitó Buenos Aires para asistir al concierto de su excompañero de banda Niall Horan el 2 de octubre.

Payne integró junto a Horan, Zayn Malik, Harry Styles y Louis Tomlinson una de las “boy bands” más exitosas de los últimos tiempos. One Direction anunció un “parón” indefinido en 2016 y Payne, como sus antiguos compañeros de banda, siguió su carrera en solitario.

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