
Usaid emitió una orden de suspensión de todos los proyectos de ayuda internacional. Esto quiere decir que pone en pausa el gasto en los programas de apoyo extranjero en distintos sectores, es decir, EE.UU. cortaría la ayuda a Colombia.
El director de la Oficina de Ayuda Exterior del Departamento de Estado envió ayer un comunicado global que ordena una pausa inmediata en el nuevo gasto de ayuda internacional, así como una orden de paralización de las subvenciones y contratos existentes.
Esta nueva directriz intensifica la reciente orden ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien impuso una pausa de 90 días en el gasto de ayuda y podría sembrar “caos” en los programas de ayuda del país norteamericano.

El texto, enviado a todas las oficinas diplomáticas y consulares señala que no deben publicarse nuevas solicitudes de propuestas, o de aplicación, avisos de oportunidades de financiamiento ni “ningún otro tipo de solicitud o requerimiento de financiamiento de asistencia extranjera” por parte del Departamento de Estado. Agregan que esto sería “hasta que cada uno haya sido revisado y aprobado por la Oficina de Asistencia Extranjera como consistente con la política del presidente”.
También se lee que “no se obligarán nuevos fondos para nuevos premios ni para extensiones de premios existentes hasta que cada propuesta de nuevo premio o extensión haya sido revisada y aprobada por F como consistente con la agenda del presidente Trump”.
La oficina de Asistencia Extranjera es la que coordina la ayuda extranjera de EE.UU. y proporciona dirección estratégica a Usaid desde el Departamento de Estado.
El texto, el cual fue aprobado por el Secretario de Estado, Marco Rubio, ordenó que, dentro de 30 días, el director del personal de planificación de políticas del Departamento de Estado “desarrolle estándares de revisión apropiados” con el fin de “garantizar que toda la asistencia extranjera esté alineada con la agenda de política exterior del presidente Trump y que los datos sobre todo el gasto de asistencia extranjera en el futuro se agreguen y se ingresen en un repositorio interno integral del Departamento.
Añaden que en los 85 días posteriores al texto publicado desde ayer deberá completarse la revisión integral de toda la asistencia extranjera a nivel gubernamental, “y se producirá un informe para el secretario de Estado para su consideración y recomendación al presidente”.
Asimismo, el texto menciona que el secretario de Estado aprobó varias exenciones a la pausa en la ayuda extranjera. Entre estas están “financiamiento militar extranjero para Israel y Egipto y gastos administrativos, incluidos salarios, necesarios para administrar el financiamiento militar extranjero, asistencia alimentaria de emergencia y gastos administrativos, incluidos salarios, necesarios para administrar dicha asistencia, de manera temporal, salarios y gastos administrativos relacionados, incluidos viajes, para empleados directos de EE.UU., contratistas de servicios personales y de personal empleado localmente así como excepciones a la pausa de financiación aprobada por el Director de Asistencia Extranjera”.
¿Cómo afectaría a Colombia?
Desde la Cancillería indicaron que la orden se trata de la suspensión de las nuevas asignaciones durante un tiempo de 90 días, esto con el fin de revisar si se alinean a la política de la nueva administración.
Teniendo en cuenta que desde que empezó el Plan Colombia, el acuerdo bilateral constituido entre los gobiernos de Colombia y Estados Unidos que se concibió en 1999, la nación norteamericana ha venido destinando US$200 millones anuales en programas que incluyen temas como el desarrollo rural, protección del medio ambiente, defensa de los derechos humanos y el fortalecimiento de la justicia, entre otros.
Esta cifra, al mes, se traduce en US$16 millones aproximadamente que en caso tal ya no llegarían al país. Esto, a menos que Marco Rubio, el secretario de Estado, haga la excepción.
Desde el año pasado esta ayuda ya enfrentaba problemática debido a que en la Cámara de Representantes, los republicanos, manifestaron su desacuerdo con el presidente Gustavo Petro, por eso se redujo a la mitad, aunque para ese momento el Senado la dejó intacta.
Debido a que las dos cámaras no llegaron a un acuerdo, se le decidió dar a Colombia recursos basado en los niveles que se habían aprobado para 2024 por medio de una Resolución de Continuidad, es decir gastar mes a mes al mismo nivel fijado anteriormente hasta que se aprobara un nuevo presupuesto para este nuevo año.