Claro que se venía venir y que me estaba preparando para la triste noticia. Claro que hay cierta lógica en el adiós de Carlo Ancelotti y en el deseo de la dirección del Madrid de abrir un nuevo ciclo. Sin embargo, se me va a hacer muy difícil ver los partidos de los merengues sin el técnico italiano sentado en el banquillo. Su primera etapa, con la maravillosa conquista de la famosa Décima, había sido eminentemente importante, pero la segunda etapa ha dado a Carletto un estatus muy especial que muy pocos pueden ostentar en la cultura madridista. Ganar, ganar y volver a ganar, tal es uno de los lemas de la gloriosa historia del Madrid y es exactamente lo que ha hecho Ancelotti.
Ganó la primera vez, se fue, volvió a Madrid y volvió a ganar. Una increíble hazaña que merece ser subrayada. Tengo que decir que me alegro mucho de que el adiós de Carletto se haga de forma tan elegante. Tanto el club como el entrenador están dando la imagen adecuada. No quieren que ningún detalle venga a ensuciar la sublime página histórica que ambos han escrito. Solo queda que los jugadores se motiven para que los tres últimos partidos de Ancelotti sean dignos de él.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí