Nueva York /
El anuncio de presidente Donald Trump sobre la construcción de 30 mil nuevos espacios en la prisión de la Isla de Guantánamo, en Cuba, para recluir ahí a migrantes indocumentados, es un nuevo llamado de alerta sobre el escalamiento en las violaciones graves a derechos humanos que padece este sector de la población en los Estados Unidos.
Así lo advirtieron en entrevista con MILENIO activistas y abogadas expertas en temas de derechos humanos y migración, quienes ven con preocupación la propagación de un discurso “xenófobo” e incluso “fascista” que pone en serio riesgo a los migrantes con independencia de si tienen o no documentos.
Stephanie Erin Brewer, directora para México de la Fundación de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA por sus siglas en ingles), dijo que si bien hay que esperar a conocer los alcances de la orden ejecutiva del presidente el solo aviso que ya se realizó es preocupante.
“Los alcances precisos del anuncio de Trump no están claros todavía, pero sin duda nos pone en alerta sobre la posibilidad de retenciones prolongadas en condiciones inadecuadas, y falta de acceso al debido proceso, para miles de personas que están buscando protección”, dijo Brewer.
El anuncio del presidente Trump ocurre en la misma semana en que desde la Casa Blanca se ha advertido que cualquier migrante por el solo hecho de no contar con una estancia legal en Estados Unidos será considerado “criminal”, y a que la secretaria de Seguridad interna, Kristi Noem, se refirió en un video a los migrantes irregulares como “bolsas de basura”.
“Este discurso de criminalizar a las personas migrantes genera miedo, fomenta la xenofobia y aumenta los riesgos de abusos contra las personas”, agregó Brewer.
La abogada internacional en derechos humanos, especialista en migración y derechos de las mujeres, Sandy G. Torrez Chávez, hizo hincapié en que el mero anuncio del presidente Trump de enviar a los migrantes a Guantánamo es una declaración de intenciones de que su administración está dispuesta a escalar una política de persecución y acoso a los extranjeros.
“La prisión de Guantánamo es la prueba viviente de que Estados Unidos puede encerrarte sin respetar ningún debido proceso para no solo privarte de la libertad sino para someterte a todo tipo de tratos crueles y condiciones inhumanas.
“Y lo que es claro es que Trump y su administración traen una agenda que no solo viola la Constitución sino tratados internacionales que son inalienables e imprescriptibles. Esta orden es una manifestación plena del fascismo con el que Trump quiere gobernar este país”, señaló la experta.
Torrez Chávez, quien colabora con las organizaciones no gubernamentales estadunidenses Equlity Now y The OpEd Project, subrayó que las instalaciones migratorias en este país de por si no son las ideales ya que, desde hace varios años, son frecuentes las quejas de malos tratos o de aislamiento.
Las autoridades a cargo de dichos establecimientos obstaculizan el contacto con los migrantes que son retenidos en esos sitios. La tarea de localizar a personas e esos establecimientos se vuelve titánica para los activistas. De concretarse el traslado a Guantánamo esto se volvería, prácticamente, imposible.
“Ya de por si los centros de detención migratoria en este país en muchísimas situaciones no cuentan ni con lo necesario para cubrir necesidades básicas y eso que son centros de alguna manera vigilados por la sociedad civil y aun así los tratos que las personas detenidas sufren son deshumanizantes.
“No quiero pensar el trato, las violaciones a derechos humanos a las que van a ser sometidas en Guantánamo”, advirtió Torrez.
Eunice Rendón, Coordinadora de la Agenda Migrante, ve la posibilidad de un incremento en los crímenes de odio en contra de la migración en general en los Estados unidos impulsada por los mensajes que vienen desde la Casa Blanca, y que va borrando la distinción entre una persona que por necesidad puede ingresar a un país, con personas acusadas de cometer toda clase de delitos.
“En la primera presidencia de Turmp crecieron 20 por ciento los crímenes de odio y yo creo que esta vez va a ser hasta peor porque ahora viene aliado con este tema de los dueños de las grandes redes sociales. Es muy peligroso”, dijo.
Rendón además advierte de la distinción entre lo que ocurría en administraciones pasadas con Obama o Biden respecto a lo que ocurre con Trump donde no se están solo llevando detenciones en las fronteras sino “tierra adentro”, lo que tiene otras implicaciones.
“Hay más de 3.5 millones de casos pendientes en las 56 Cortes de migración de Estados Unidos. Lo que ellos (el gobierno) quiere es no pasar por esas Cortes, sino que están buscando equiparar el tema con delitos, hacer deportaciones expeditas o evadir el debido proceso”, concluyó.
ksh